PSICOLOGIA FORENSE

PSICOLOGIA FORENSE

INSTRUMENTOS DE EVALUACION





Ego Function Assessment (EFA): Es un instrumento desarrollado por Bellak (1976) que evalúa 12 funciones del yo. Es una técnica cuantitativa y cualitativa, que asigna a cada función una puntuación cuyos valores oscilan entre 1 (deterioro máximo) hasta 13 (función óptima). Las funciones objetivables son las siguientes: contacto con la realidad, juicio crítico, sentido de la realidad, regulación y control de impulsos, relaciones objetables, procesos cognitivos, regresión adaptativa, funciones defensivas, barrera de estímulos, funciones autónomas, funciones sintéticas y liderazgo competencia.




El MSE, de Slobogin, Melton y Showalter (1984): Es una pauta de entrevista diseñada para evaluar el funcionamiento psicológico en el momento del delito. Dicha pauta consta de tres partes: información histórica, información sobre el delito y examen mental actual.

En la primera sección, información histórica, evaluaremos: a) Historia prolongada de conducta bizarra, b) Trastornos compulsivos, c) Conductas bizarras que sugieren condiciones psicóticas o propias de trastornos neuropsicológicos, d) Episodio de conducta bizarra, y e) Trastornos afectivos.

En la segunda sección, información sobre el delito, observamos: A) Información del acusado: respuesta genérica, relato detallado del delito, sucesos que le condujeron al delito, reacción posterior al delito. B) Información de otras fuentes: acusación, querella o información, declaraciones ante la policía o juez, notas de los abogados, informes de la autopsia y declaraciones de los testigos.

En la tercera sección utilizaremos cualquiera de los instrumentos actuales para examinar el estado mental del sujeto.


RCRAS: fueron desarrolladas por Rogers (1984) diseñado usando graduaciones de la severidad para estandarizar la evaluación de la información clínica, de forma que la ambigüedad de la decisión sobre responsabilidad criminal se pueda reducir al mínimo.

Las cinco escalas producidas por el RCRAS son: confiabilidad del sujeto, organicidad, psicopatología, control cognoscitivo y control del comportamiento. Cada uno de los 30 ítems se escala con unos valores comprendidos entre 0 y 6. Las escalas RCRAS realizan una valoración de los aspectos siguientes:

Fase 1: Recogida de datos. Para esta fase primero se hace una revisión de los informes policiales, declaraciones y sumario; y segundo una o varias entrevistas centradas en: a) antecedentes psicológicos, b) antecedentes psiquiátricos, c) conducta delictiva anterior, d) diagnóstico diferencial, e) examen del estado mental del acusado en la época del delito, f) cualquier información necesaria para completar a las segunda y tercera fases.

Fase 2: Escalas de evaluación de variables psicológicas y situacionales (PSV). En esta fase lo primero que se indaga es la fiabilidad del sujeto, y se profundiza en: a) fiabilidad de los autoinformes, b) interferencias involuntarias en el informe del acusado; El segundo paso a seguir es indagar sobre la organicidad, profundizando en: a) nivel de intoxicación en el momento del delito, b) evidencia sobre alteración o daño cerebral, c) relación del daño cerebral con el acto imputado, d) retraso mental, e) relación del retraso mental con el acto imputado; Tercero, psicopatía; profundizando en: a) conducta bizarra observable, b) nivel general de ansiedad, c) amnesia sobre el delito imputado, d) delirios, e) alucinaciones, f) afecto depresivo, g) afecto maníaco, h) nivel de incoherencia verbal, i) intensidad y adecuación del afecto, j) evidencia de trastorno formal del pensamiento; Como cuarto, control cognitivo: a) preparación y planeamiento, b) concienciación de la criminalidad de la conducta, c) focalización del delito, d) nivel de actividad en la comisión del delito imputado; Quinto, control conductual: a) conducta social responsable durante la semana anterior, b) autocontrol informado por el acusado, c) estimación del autocontrol del acusado por el evaluador, d) relación de la pérdida de control con las psicosis, e) alteración de razonamiento, f) alteración de la conducta, g) alteración del juicio de realidad, h) capacidad para auto cuidarse, I) concienciación de la maldad del acto.

Fase 3: Aplicación de los modelos decisionales. De acuerdo con el modelo de evaluación psicológico-interaccionista-integrador, nuestro análisis permitirá establecer un análisis más preciso sobre múltiples variables correlacionadas con la imputabilidad de la persona. Así, podremos presentar y defender ante el tribunal si el trastorno o limitación se focaliza, entre otros, en: a) conciencia (tóxicos), b) inteligencia convergente (retraso mental), c) Estilo atribucional interno (depresión), d) pensamiento divergente (psicosis), e) Percepción (alucinación), f) memoria (amnesia, demencias), g) afectividad (depresión), h) estilo atribucional externo (trastorno paranoide), i) motivación (paranoia), j) emoción (ira), k) impulsos (ludópata, trastorno límite de la personalidad), l) tolerancia a la frustración (Alcohol).